Cuando el destino quiere unir a dos personas... ...da igual lo lejos que estén o los cambios que pueda dar la vida. Emma, mi bella serenita finlandesa... ...y Hugo, mi mexicano amante de la música y de gozar la vida. En su mesa no podía faltar todo el color de México y la sencillez y el azul de Finlandia. CONTACTA VER MÁS